En 2025, la personalización dejó de ser un diferencial para convertirse en una expectativa estándar de los huéspedes. Los hoteles que adoptan estrategias de personalización impulsadas por datos están viendo aumentos significativos en conversiones, fidelización y rendimiento general.
1. Personalización como Motor de Ingresos
Los estudios indican que el 71% de los consumidores esperan interacciones personalizadas, y el 76% se sienten frustrados cuando esto no ocurre. En la hotelería, esto se traduce en ofertas que reflejan las preferencias individuales de los huéspedes, como early check-ins para viajeros de negocios o beneficios de spa para turistas de ocio.
2. El Momento Adecuado es Crucial
La efectividad de las ofertas personalizadas está directamente ligada al timing. Presentar upgrades o servicios adicionales en el momento adecuado —ya sea antes de la llegada, en el check-in o durante la estancia— puede aumentar significativamente las tasas de conversión.
3. Inteligencia Artificial y Automatización como Estándar
El uso de IA para analizar comportamientos y preferencias de los huéspedes permite entregar ofertas altamente relevantes en tiempo real. Los hoteles que incorporan estas tecnologías están personalizando a escala, aumentando ingresos y la satisfacción del cliente.
4. Enfoque Mobile-First
Con la creciente preferencia por interacciones vía móvil, especialmente entre los viajeros más jóvenes, es esencial que los hoteles ofrezcan experiencias optimizadas para dispositivos móviles, desde el proceso de reserva hasta la comunicación durante la estancia.
En resumen, la personalización en la hotelería ya no es una opción, sino una necesidad estratégica. Los hoteles que adoptan enfoques centrados en el cliente, utilizando datos y tecnología, no solo están cumpliendo con las expectativas de los huéspedes, sino también impulsando sus ingresos y fortaleciendo la lealtad.
Futuro de la Personalización
El futuro de la personalización en la hotelería es profundamente humano, aunque potenciado por datos e inteligencia artificial.
Avanzamos hacia un escenario donde cada interacción será contextual, empática y propositiva, anticipando deseos incluso antes de ser expresados.
Más que conocer al huésped, será necesario comprenderlo. Para ello, los hoteles deberán invertir no solo en tecnología, sino en una cultura organizacional centrada en el cliente, capacitación continua de los equipos e integración inteligente de sistemas.
La personalización será el vínculo entre eficiencia y encantamiento, y los hoteles que adopten esta visión desde ahora no solo estarán preparados, sino que estarán a la vanguardia.